Las Casas de la Música

En La Habana hay tres Casa de la Música donde actúan periódicamente todos los artistas cubanos que no se encuentran de gira en ese momento. Este particular nombre hace referencia al templo de la música cubana.

Es visita obligada asistir a uno de los conciertos que tienen lugar en cualquiera de ellas. En las tres salas actúan en directo los grupos musicales más importantes del momento pero es conveniente conocer antes el programa semanal y seleccionar así la actuación del mejor grupo, en ocasiones con actuaciones de grupos incipientes. El programa de cada día se divide en dos sesiones; la sesión de tarde de 17 a 21 horas y la sesión de noche, desde las 22 a las 3 de la madrugada. En la sesión de noche suelen actuar los grupos más relevantes.

Asimismo si realizamos un viaje para conocer otras provincias recordemos que cada cuidad tiene su Casa de la Música. Por lo que os aconsejamos asistir a la Casa de la Música de la ciudad en la que nos encontremos, para disfrutar de su música en vivo, revivir la música tradicional cubana de la mano de los músicos actuales y entender el espíritu cubano, el carácter de su gente y disfrutar de la autentica Cuba.

Y este no es un consejo baladí. Cuba ha sido desde siempre la cuna de ritmos donde han nacido géneros de bailes que se han dado a conocer a nivel mundial, siempre gracias al talento de sus músicos. Aquí nació el Son, el Mambo, el Chachachá, el Bolero, la Rumba y el casino entre otros. En la Casa de la Música de La Habana tendremos la oportunidad de disfrutar de los grupos actuales cubanos, generalmente del género Salsa, Timba o Reggaeton. Los grupos actuales se inspiran en la tradición de ritmos cubanos que fusionan con las tendencias actuales internacionales para las nuevas creaciones.

Las más conocidas son la Casa de la Música de Centro Habana en la calle Galiano, esta recién inaugurada en noviembre 2019. Ha tenido una gran reforma que se ha dilatado en el tiempo pero ha valido la pena la espera, porque ahora además cuenta con nuevas instalaciones de sonido. Si todavía tenemos fuerzas podemos continuar en Habaneciendo, a tan solo 20 metros al girar la esquina en la calle Neptuno.

La segunda más importantes es la Casa de la Música de Miramar, en la calle 18. También aquí, al finalizar la sesión podemos continuar en el “Diablo Tun, Tun”. Pero tal vez sea demasiado alargar la noche, sobre todo pensando en todo lo que se puede visitar al día siguiente.

Y la más reciente, la Casa de la Música de Plaza, que toma este nombre por su proximidad a la Plaza de la Revolución, se encuentra en la esquina de la calle 2 y 35, (53-7) 78303146. Esta abierta de jueves a domingo, al estar inaugurada desde 2017, es menos visitada por los turistas, cuenta con un equipo de sonido nuevo, tiene amplios espacios y un gran escenario. Es ideal para sumergirnos en un ambiente cubano y con precios más populares. La sesión de tarde tiene lugar en un ambiente más acogedor, en su piano bar “Convergencias”.

La Timba Cubana es actualmente el género musical cubano moderno más frecuente en la Casa de la Música y en toda Cuba. Es un ritmo ágil, de letras divertidas. Es el ritmo cubano que desde los 80 esta en la preferencia de los bailadores. Los intérpretes de este género dicen que para hacer Timba hay que poner el corazón. La Timba es la fusión de la rumba y la guaracha con el Son y el Mambo, aderezado con toques de pop, rock y funky. Y en las  interpretaciones de los solos de sus músicos aparece el jazz caribeño. Las letras son crudas, una lírica que muestra la agresividad de los tiempos que vive Cuba. Pero el mundo conoce este género comúnmente como salsa cubana. Una música que venció el bloqueo de los circuitos de la industria musical y que ha inundado Europa, Asia y los Estados Unidos.

Tiene sus antecedentes en cuatro compositores o grupos: El grupo los Van Van de Juan Formell o su pianista Cesar Pedroso que más tarde formaría su propia banda, Pupi y los que Son Son. Ambos  crearan  propiamente una fusión de son y el pop español. El grupo Irakere bajo la dirección de Chucho Valdés, fusionará la música popular cubana y la rumba de instrumentos de viento y de tambores batá con el Jazz Latino y la música electrónica. También la agrupación Dan Den de Juan Carlos Alfonso y por último Adalberto Álvarez con el Conjunto Musical Son 14 que dará lugar al renacimiento del Son salseado de más velocidad.

Hoy la Timba ha cambiado la concepción que tienen los estudiantes en los conservatorios de música cubanos. Y de ellos surgen agrupaciones nuevas. La Timba que empezó como una moda hoy consigue Premios Grammy y triunfan en escenarios internacionales. Otros muchos grupos destacan y se suman a las orquestas representativas iniciales como Manolito Simonet, NG La Banda, Isaac Delgado, Paulo FG, Charanga Habanera, Bamboleo, Maikel Blanco y su salsa mayor y Habana de Primera entre otros muchos.

Haremos un poco de historia relacionado con los artistas actuales para reforzar las razones por los que se debe visitar La Casa de la Música.

El Son fue declarado en 2012 patrimonio cultural de Cuba y algunos de los soneros más famosos fueron Ignacio Piñeiro, Bienvenido Julián Gutiérrez, Benny Moré, Faustino Oramas, Dúo Los Compadres, el Trio Matamoros y ya en la actualidad Elíades Ochoa, Morenas Son, el Septeto Santiaguero entre otros muchos. O el mismo Kelvis Ochoa, canta autor, que aglutina varios géneros cubanos a la vez.

El bolero se ha ido fusionando a lo largo del tiempo con otros géneros musicales, en los 80 el bolero-rock de Osvaldo Rodríguez y en la actualidad el bolero-salsa de Leoni Torres. Y dicen incluso que el bolero ha dado lugar a la Bachata. La lista de artistas cubanos del Bolero es inmensa, todos recordamos, Ramón Armengod, César Portillo de la Luz, Rolando Laserie, La Lupe y más recientemente a Celia Cruz, Omara Portuondo, Pablo Milanés, Osdalgia Lesmes y Lucrecia. Si, el bolero nació en Cuba, se extendio exitosamente y hoy músicos de todo el mundo lo interpretan este genero.

Y por último la Rumba, inicialmente era una danza folklórica afrocubana que servía como un baile de fertilidad. Surgió durante el colonialismo español, se bailaba en las tabernas y se hizo popular en las primeras décadas del siglo XX. La Rumba cubana fue declarada por la Unesco en 2016 Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.